Pues ya se dio a conocer el Presupuesto de Egresos para 2025 para Hidalgo y la Secretaría de Educación Pública estatal (SEPH) recibirá más de 29 mil millones de pesos de los 71 mil millones que se ejercerán en total para esta anualidad.
Pero esperemos que ese dinero en verdad se destine a lo que se debe, como infraestructura, mobiliario escolar, contratación de más docentes en donde hagan falta, atención mental, talleres sobre bullying; en fin, atender todos esos temas que hacen falta para garantizar una educación de calidad.
El secretario Natividad Castrejón tiene un reto, porque al recibir más del 40 por ciento del presupuesto, pues debe hacer buen uso de este y no dejarlo ir a su bolsillo o al de otros como ocurrió en pasadas administraciones.
México está mal en educación, un tanto por el rezago que dejó la pandemia por Covid-19 y otro tanto por lo que hizo la pasada administración federal, de desaparecer materias y hacer proyectos para el “aprendizaje”, con libros con faltas de ortografía o disque “inclusivos” en donde los que están aprendiendo a leer no saben cómo leer la “x” en palabras como “todxs”.
Si bien el tener escuelas en óptimas condiciones también es necesario, pues regresar a una educación en donde en verdad te enseñen de historia, de geografía, matemáticas, español y demás, es necesario, porque verlo por encimita, pues sí está del nabo.
Aplaudimos que se le invierta a la educación, solo esperamos que se invierta bien y no solo en darle más y más a un sindicato que no tiene llenadera, que solo sabe pedir, pues de lo contrario cierran caminos.
Yo sé que tienen derechos, pero, “wey, ya”. Ganan un buen, les dan carros, les hacen comidas en grande, les llevan grupos nacionales e internacionales, les dan regalos, en fin, no tienen fondo.
Otra dependencia que subió su presupuesto, en menor medida, pero tuvo aumento de por lo menos mil millones, es la secretaría de Infraestructura Pública (SIPDUS), en donde esperamos que por fin arreglen caminos, tapen baches, arreglen conflictos viales, y no solo se dediquen a hacer estudio sobre estudio sobre estudio de cómo combatir el tráfico.
Pero ojalá sean obras de calidad, y no de esas que solo duran solo unos meses o días y después se cómo se desprende el asfalto, se cuartea o se hacen los baches en donde se supone los habían tapado.
Sabemos que no hay recurso que alcance, pero si se aplica bien podría alcanzar para lo que se requiere, porque acuérdense que lo barato sale caro, y si siguen con esa tendencia de pagar tantito aquí para darle tantito acá, pues nunca vamos a avanzar.
Pero es nuevo año y vamos a dar el beneficio de la duda, con la esperanza y confianza de que el dinero se usará para lo que es y no para lo que otros quieren (llenarse sus bolsas).
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